por Nora Spivak
¿Cómo son los procesos del arte?
Dónde está el germen, en qué lugar se encuentra la primera
idea y qué forma va a tener. ¿Cómo se estructura el discurso visual que se basa
en la percepción? Tal vez el arte sea un permanente ensayo, una búsqueda que no
tenga un cauce lógico o asible. Se puede presentar débil ante la lógica y ser tan
evanescente como su propio discurso. Sin embargo es eso mismo lo que lo define
y lo lanza como objeto de arte.
“…hay algo
maravilloso en ver cómo una figura emerge de la piedra sin que nadie la
conjurara, en sentir la presencia de algo dentro de uno…que también existe más
allá de uno: algo consistente, obstinado y benevolente que parece tener un
plan, y ese plan parece elevarnos a una nueva estatura moral. “ George
Saunders, The Guardian.
En la imagen pensada
para el cine también hay una dinámica, podría decirse que es un motor interno
que produce la forma y la manera de decir mientras se indaga, se busca y se
produce un boceto. Los primeros trazos se van nutriendo de ideas que tienen su
correlato en otra imagen que a su vez genera otra y así, en movimiento como la
película misma.
El no saber, la duda
como motor, incita a buscar el “contagio” de otras fuentes que pueden “disparar”
hacia los lugares transitados por nuestros referentes, los que dijeron “eso” a
su manera.
Es valioso el dialogo
del lápiz sobre el papel, el sentido de dibujar pensamientos o de graficar
ideas. Por la pulsión que genera. Un diálogo que puede abrir un camino de
apertura más allá de lo que creíamos o teníamos como certeza.